‘Debí Tirar Más Fotos’ de Bad Bunny: Una inmersión en la identidad puertorriqueña
Bienvenidos a un nuevo rincón en Platea, Primera Persona. En esta sección, exploraremos reflexiones profundamente conectadas con Puerto Rico, esas que te hacen sentir un cosquilleo del bueno en el corazón.
Con el lanzamiento a todas luces estelar de Debí tirar más fotos (DtMF), su sexto álbum de estudio, Bad Bunny parece haber reafirmado su renombre como el exponente por excelencia de la música puertorriqueña en el siglo XXI.
Aquel una vez embolsador y comunicador, ahora superestrella del género urbano, es hoy día sinónimo de Puerto Rico alrededor del mundo, y con esta más reciente propuesta musical, el artista vegabajeño ha consolidado su puesto como líder de opinión indiscutible tanto en la isla como en el exterior.
¿Artista? ¿Cómo que artista?
Sí, Bad Bunny es un artista, y DtMF es su ejemplo más claro de ello. Encima de catapultarse a lo más alto de las listas musicales alrededor del mundo, y a tono con las incursiones cada vez más contundentes de su autor dentro de nuestra situación política regional, este álbum induce esfuerzos de introspección y preguntas complicadas para cualquiera que lo escuche, como toda obra de carácter político y social similar.
Y pongan un tema mío el día que traigan a Hostos
En la caja la bandera azul clarito
Y que recuerden que siempre fui yo, siempre fui Benito
🎶 Letra: LA MuDANZA
Aparte de su planteamiento inicial, el álbum demuestra a grandes rasgos la profundidad narrativa y lírica del vegabajeño, así como una cohesión narrativa que evoluciona y construye sobre el carisma entrañable pero a veces desarticulado de proyectos anteriores como X100PRE y El último tour del mundo.
Debí tirar más fotos, como pieza conjunta, sobrepasa las cumbres emocionales más elevadas de la discografía de Bad Bunny –sí, hasta las de Un verano sin ti–, porque más allá de todos sus proyectos anteriores, este ha sido con en el que Bad Bunny parece haber solidificado su voz ideológica, aquella que anteriormente se asomaba tímidamente (aunque ya bien sabíamos que estaba presente), pero hoy alcanza su máximo esplendor.
Aquí nadie quiso irse, y quien se fue, sueña con volver
Si algún día me tocara, qué mucho me va a doler
Otra jíbara luchando, una que no se dejó
No quería irse tampoco y en la isla se quedó
🎶 Letra: LO QUE LE PASÓ A HAWAii
Muchos boricuas y latinoamericanos que no le expresan simpatía luchan por entender cómo Benito Martínez Ocasio se ha convertido en una figura tan ubicua dentro de nuestra cultura popular contemporánea. A favor de ellos, intentaré justificar una aproximación.
Para comprender al fenómeno inescapable que es Bad Bunny, uno necesita entender el tiempo y el espacio en el que vio su crecimiento, y a su fanaticada original: aquella juventud boricua criada durante el comienzo de siglo que le ha levantado sobre sus hombros desde su comienzo como trapero adolescente en Soundcloud.
Una noche en Maya en el 2018
Mi primer encuentro frente a frente con Bad Bunny ocurrió a mis 18 años, en un evento de Yellow Halloween en Mayagüez. En aquel entonces, burbujeando de emoción, me empaqueté con un colega junto a otros cientos de personas por una calle angosta del pueblo con la esperanza de poder divisar, en una minúscula tarima a la distancia, a aquel trapero que coreaba “Chambea, jala” y que mis amigos no encontraban cómo sacarse de la boca.
El camino hasta DeBÍ TiRAR MáS FOToS
X 100PRE
2018
Oasis
2019
YHLQMDLG
2020
Las Que No Iban a Salir
2020
El Último Tour Del Mundo
2020
Un Verano Sin Ti
2022
Nadie sabe lo que va a pasar mañana
2023
Debí Tirar Más Fotos
2024
Fue un esfuerzo inútil. A medida que aquellas primeras trompetas, ahora tan reconocibles, comenzaron a tronar, la masa de personas a mi alrededor se sacudió de tal manera que ambos salimos volando en búsqueda de algún lugar seguro donde pudiéramos volver a respirar.
Allí, atrapados durante el resto del espectáculo dentro de una barra incómoda, recuerdo haberme preguntado cómo era posible haber sido sujeto de semejante fuerza de la naturaleza.
Esta generación, mis contemporáneos, no era ajena a las nuevas promesas del trap latino. Cabe recalcar que, junto a Bad Bunny, se estrenaron simultáneamente una ristra de exponentes similares, como Anuel AA, Ozuna, Bryant Myers y Farruko.
Todos estos últimos, aparte de tantos otros sin mencionar, alcanzaron distintos niveles de éxito tanto en el mercado local como en el internacional, apoyados de la ola de auge que generó la música urbana en la segunda década de los 2010. Ninguno, sin embargo, obtuvo tantos triunfos como El Conejo Malo.
A mi entender, esto se debe a tres factores: su variabilidad, su activismo y su universalidad.
Ian Acevedo es comunicador independiente y consultor en formación, con experiencia en la escena musical puertorriqueña, actualmente basado en Madrid.
Foto de portada: @badbunnypr, Instagram / Paras Griffin, Getty