Ley de plásticos de un solo uso: retos y oportunidades tras extensión del periodo sin multas
Los restaurantes y negocios de comida en Puerto Rico tendrán seis meses adicionales para eliminar los plásticos de un solo y el foam uso de sus operaciones. El Departamento de Asuntos del Consumidor (DACO) extendió hasta el 1 de julio de 2025 el periodo para comenzar a multar a quienes incumplan con la Ley 51 de 2022, que busca una transición al uso de envases y cubiertos reusables, compostables o biodegradables.
Te explicamos qué significa esta extensión y cómo se prepara el país para este cambio.
Inicialmente, el estatuto disponía que las multas de entre $500 y $5,000 debían comenzar a imponerse a partir del 1 de enero de 2025. Mientras algunos negocios ya han hecho la transición, otros enfrentan retos con el inventario y los costos.
La extensión del periodo sin multas, firmada el 27 de diciembre, busca “ofrecer un periodo razonable para que los comercios puedan ajustar sus prácticas, mientras continuamos brindando orientación y educación para que el cumplimiento sea alcanzable para todos“, expresó por escrito el secretario interino del DACO, Francisco González de la Matta.
Esta decisión se da mientras la Asociación de Restaurantes de Puerto Rico (Asore) mantiene un proceso legal ante el Tribunal de Apelaciones sobre el reglamento conjunto del DACO y el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) para esta ley, argumentando que necesita mayor claridad para su implementación.
¿Qué productos no se podrán usar y cuáles sí?
Los plásticos de un solo uso son productos diseñados para desecharse después de usarse una vez. Bajo esta ley, quedará prohibida la venta y uso de cubiertos, platos y sorbetos de plástico, así como los vasos, tazas y contenedores de alimentos hechos de poliestireno expandido (foam) para consumo inmediato o para llevar alimentos.
Como alternativa, los comercios podrán usar y vender:
- Plásticos reutilizables
- Materiales biodegradables (que pueden descomponerse por microorganismos)
- Materiales compostables, que pueden descomponerse en 90 a 180 días por la “acción de bacterias u otros medios biológicos, sin dejar residuos dañinos, según certificados por el Biodegradable Products Institute.
¿Cuál es la diferencia?
Biodegradable
Compostable
Todo lo compostable es biodegradable, pero no todo lo biodegradable es compostable.
¿De cuánto son las multas y quién las emite?
Las multas serán impartidas por inspectores del DACO, tras una inspección al negocio. Inician en $500 por la primera infracción, $1,000 por la segunda y $5,000 por infracciones adicionales.
En estos seis meses adicionales sin multas, se espera que los inspectores del DACO refuercen sus programas de orientación y supervisión para que todos los comercios puedan cumplir con la ley.
Sin embargo, hay excepciones
La ley contempla situaciones específicas donde se podrá continuar usando plásticos de un solo uso o foam:
- En la venta de carnes y alimentos en supermercados que, “por su composición, no exista una alternativa de plástico de más de un solo uso que lo sustituya”.
- En farmacias, laboratorios, hospitales e instituciones en las cuales el gobierno federal o estatal haya determinado que se restringe el uso de materiales no plásticos. Por ejemplo, los medicamentos seguirán vendiéndose en envases de plásticos de un solo uso, según lo establece la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA).
- En periodos de emergencia establecidos por el gobernador(a) de Puerto Rico o el presidente de Estados Unidos.
Cabe destacar que las cafeterías en hospitales y otras instituciones exentas sí deberán cumplir con la Ley 51 de 2022, dijo a Platea Antonio Ríos, asesor de Sostenibilidad del DRNA, la otra agencia encargada del cumplimiento de esta ley.
Desafíos en la implementación
El proceso legal y las preocupaciones del sector:
El 6 de diciembre de 2024, el Tribunal de Apelaciones emitió una resolución que pausaba la puesta en vigor del Reglamento 9570 y dio 30 días al DRNA y al DACO para presentar sus argumentos. Esto respondió a una moción de Asore que plantea que el reglamento necesita mayor claridad para evitar afectar las operaciones de los negocios de alimentos.
A partir de esta resolución, comerciantes como Mateo Cidre, propietario de Sobao Bakery & Restaurant, entendían que el DACO no podía emitir multas a los comercios, ya que el asunto se continúa discutiendo en el tribunal. “No te pueden multar porque la ley es tan ambigua que no define qué es un plástico de un solo uso. No especifica cuáles son los productos que puedes usar”, dijo Cidre en entrevista con Platea, previo al anuncio de la extensión del DACO.
Un reto importante es asegurar que haya suficiente inventario en Puerto Rico de productos biodegradables y compostables. El gobierno asegura que los distribuidores están preparados, pero comerciantes informan dificultades:
- Algunos negocios reportan escasez frecuente de alternativas sostenibles
- Muchos productos no se producen localmente y pueden tardar meses en llegar, como las tapitas de plástico de un solo uso para los cafés, según Cidre.
- Los costos son significativamente más altos: entre 30% y 40% según Asore.
“Ha sido un calvario porque a cada rato se quedan sin el producto. Hay que acudir al plástico o al foam porque no están preparados para suplirlos“, explicó Cidre, quien inició esta transición desde 2018.
Por su parte, el asesor de Sostenibilidad del DRNA sostuvo que el gobierno se ha comunicado con los distribuidores y suplidores de estos productos de empaque para que sepan cuáles pueden vender.
“A nuestro entender, los distribuidores se han ido preparando y tienen disponibles”, dijo Ríos. Pese a esto, sugirió a los comerciantes comunicarse directamente con sus suplidores para identificar productos certificados como biodegradables y compostables.
¿Qué están haciendo los negocios?
En Sobao, Cidre ha impulsado el cambio a plásticos de más de un uso y empaques biodegradables y compostables desde antes de esta ley, pero todavía duda poder ofrecer un 100% de sus productos en estos empaques precisamente por los problemas de suministro que ha enfrentado.
Por su parte, la heladería Mucho Gusto en Río Piedras ha apostado desde sus inicios por alternativas ecoamigables, usando paletitas de madera, sorbetos de cartón y vasos compostables, aunque también enfrenta ocasionalmente problemas de inventario, según Charlie Lugo, empleado de la heladería. El día que visitamos el negocio, solo había batidos de un tamaño porque el suplidor no tenía el vaso más pequeño que también suelen ofrecer.
Sin embargo, todavía hay comercios que no han iniciado la transición. Tal fue el caso de un comerciante de un restaurante chino consultado, que seguía comprando plásticos de un solo uso y foam porque entendía que conservaban mejor los alimentos y porque su suplidor seguía vendiéndolos. “Cuando no los vendan, vamos a ver cuál será el sustituto”, dijo a Platea.
Por su parte, Ríos aseguró que tanto el DRNA como el DACO han participado de varios foros y han hecho un media tour para orientar a consumidores y negocios sobre esta ley.
El panorama más allá de Puerto Rico
La eliminación de plásticos de un solo uso es una tendencia global que busca reducir la contaminación ambiental. En Estados Unidos, la medida avanza a diferentes niveles:
- Ocho estados ya han prohibido las bolsas de plástico: Connecticut, California, Delaware, Hawaii, Maine, Nueva York, Oregon y Vermont
- El Departamento de Interior eliminará gradualmente los plásticos de un solo uso en parques nacionales y terrenos públicos para 2032. La iniciativa busca reducir los más de 14 millones de toneladas de plástico que llegan al océano cada año.
En Europa, la Unión Europea comenzó en 2019 un plan para reducir paulatinamente estos productos, aumentar el reciclaje y alterando su composición. Para 2030, se prohibirán ciertos empaques de plástico de un solo uso en todos los países miembros.
- En España, por ejemplo, desde 2023 los comercios deben cobrar por los envases no reutilizables.
En el Caribe, varios países vecinos ya han tomado medidas similares, incluyendo Costa Rica, Dominica, Granada, Trinidad y Tobago, Haití, y Antigua y Barbuda.